domingo, 6 de octubre de 2013

"El clan VIANA, descendientes del primer gobernador español de Montevideo"




Enrique "Rodríguez" Larreta Maza
Choznonieto de José Joaquín de Viana y Sáenz de Villaverde




Un caballero español




Corre el año 1751. Montevideo es una ciudad pequeña y recoleta que se yergue como bastión fortificado para la defensa de los dominios de España en el Atlántico sur. El 14 de marzo una fiesta inusual interrumpe la monotonía del presidio que se viste de gala para recibir a un personaje de campanillas. Se trata del funcionario designado por la Corona como gobernador de la plaza. Hay una cierta tensión en el ambiente, un cierto nerviosismo en los cabildantes, pero pronto se diluyen las inquietudes cuando el procónsul, un hombre joven –treinta y dos años- de ojos rasgados y mirada amistosa, entra en contacto con el cuerpo capitular y transforma la ceremonia solemne de recepción en una cordial reunión en la que hasta se saltea por olvido una exigencia de rigor: la de pedir al recién llegado el afianzamiento preceptuado por las leyes para el caso de ser enjuiciado en resistencia.

Don José Joaquín de Viana y Sáenz de Villaverde, el flamante gobernador, el primer gobernador que habrá de tener Montevideo, es un español que ostenta grado de Coronel y cuyo nombramiento viene rubricado por Fernando VI y datado en Buen Retiro el 22 de diciembre de 1749. Trae fama de militar valeroso se sabe que hizo campañas de Saboya y Piamonte a las órdenes del duque de Alba y del marqués de la Mina.

Es oriundo de Lagrán, partido judicial de La Guardilla, en la provincia vasca de Álava, donde su familia goza del estamento noble. El mismo ha debido probar la condición de su linaje un año atrás para acceder al hábito de Calatrava. Señorial palacete de piedra es la casa solariega paterna. El balconaje luce orgulloso los relieves que reproducen la heráldica familiar, blasón de ocho cuarteles donde el águila de la estirpe de varonía a debido anidar entre los árboles y los castillos aportados por las alianzas con otras prosapias de la nobleza circunvecina. Es la misma águila que aparece estampada en la certificación de blasones que lleva la firma del rey de armas Juan Alfonso de Guerra y Sandoval, pergamino lujosamente iluminado que en 1747 recibieran don José Joaquín y su hermano don Francisco, mas tarde también caballero de Calatrava. Gentes de pro, tanto su padre, su abuelo, como su bisabuelo han desempeñado en la villa de Lagrán, entre 1694 y 1737, los empleos de Alcaldes y Regidores, amén de haber pertenecido a la noblílica cofradía local del Santísimo Sacramento, cuyo ingreso según - según ordenanzas fechadas en 1652- se efectuaba por rigurosa información de nobleza rendida ante abad y dos cofrades.

El 20 de marzo de 1718 don Gabriel Sáenz Galbarro había impuesto los óleos bautismales a José Joaquín de Viana en la Iglesia de Lagrán. Allí mismo se habían casado el 15 de julio de 1715 sus padres. Gregorio de Viana Pérez de Pariza y María Sáenz de Villaverde.

También en esa misma iglesia se bautiza a Melchor de Viana y Fernández, quien llega a Montevideo como parte del séquito del Gobernador, y se convertirá en el tronco de la rama menor de los Viana. Hermanos de don José Joaquín son Jaime, militar y titular del mayorazgo de su casa en Lagrán y Francisco que había sido secretario de la duquesa de Alba. Los expedientes de los Viana – en Lagrán, en la Ordenes, en la Real Compañía de Guardias Marinas- enumeran celosamente a los del mismo apellido que han escalado posiciones espectables. La familia, en la sociedad española del siglo XVIII, es como una red que cubre y protege al individuo. Las glorias de cada pariente se proyectan sobre tíos, primos y sobrinos, y cada uno, de acuerdo a la singular mentalidad de aquel tiempo, las contabiliza como mérito propio.

Bajo la administración de Viana la Banda Oriental realiza notorios progresos. La jurisdicción de Montevideo ve triplicar el número de sus habitantes y, a la vez aumentar el de sus poblaciones. El bizarro comportamiento del calatravo, tanto en las faenas de la guerra como en la de la paz, merece conceptuosas recomendaciones de sus superiores. Su obra resulta positiva y bien vista.

A la vez su peculio personal se ve acrecentado por las mercedes de tierras de las que la Corona hacen objeto a él y a su mujer. Campo de generosa extensión, que hoy corresponden a las jurisdicciones de Aiguá, Marmarajá, Barriga Negra, Tapes, Godoy y Polanco, limitados por el río Cebollatí y el arroyo Aiguá, son inmensos y feraces latifundios que transforman a su casa en la titular de una de las fortunas mas nutridas de la Banda Oriental en el siglo XVIII.

El 4 de noviembre de 1755 se había verificado en Montevideo el matrimonio del Gobernador con la señora doña María Francisca de Alzáybar. Los casó el párroco José Nicolás Barrales y oficiaron de testigos de la ceremonia el tío de la contrayente, don Francisco de Alzáybar, encumbrado personaje, cofundador de Montevideo y para algunos su fundador, debido no solo a que fundó Montevideo a su costo sino que también están de acuerdo los historiadores que sin Alzáybar, su generosidad y desprendimiento, éste Montevideo no existiría. Martín de Altolaguirre y el teniente de Gobernador de la plaza, Dr. Pedro León de Soto y Romero. María Francisca, mas tarde popularmente conocida como “La Mariscala”, era también vasca, hija de Juan de Alzáybar Padura y María de Ealo. La presencia de esta dama en Montevideo se debe a instancias de su poderoso tío, don Francisco, quien no debió ser ajeno al arreglo matrimonial.

Ella aporta en el acto mil yeguas y seis mil cabezas de ganado, dote con la que le ha agraciado el magnate vizcaíno y que le ha entregado a cuenta de un total de 30 mil pesos. En los esponsales recibe de Viana, por vía de arras, dos sortijas: una con diamantes y una esmeralda, y otra con un solitario de diamante. Desde entonces el pueblo montevideano aprende a respetar en ella- se dice que vestía de amazona y montaba magnífico a caballo- un símbolo fuerte y altivo de la aristocracia dieciochesca.

Viana muere en Montevideo el 13 de diciembre de 1773. Los achaques de salud le habían obligado a resignar las funciones de gobierno unos meses antes. El 25 de febrero había redactado su testamento en esta ciudad, pidiendo que su cuerpo fuera enterrado “sin pompa y pobremente”. Declaraba entonces como sus herederos únicos y universales a sus hijos legítimos que fueron: José Joaquín, María Francisca, Teresa, Margarita, Francisco Xavier y Josefa.

José Joaquín, el hijo homónimo del primer Gobernador de Montevideo ha nacido en esta ciudad el 9 de septiembre de 1759, se ha iniciado en la carrera de armas en la adolescencia y a los veintidós años revista como Subteniente de Infantería de Buenos Aires. Su matrimonio se registra el 25 de enero de 1786 con Ángela Mendoza Díaz.

De su matrimonio con Ángela Mendoza quedaron dos hijas: Francisca Antonia y María de la Natividad. La primera fue bautizada en Montevideo el 3 de septiembre de 1783 y se casó en Asunción del Paraguay el 14 de junio de 1799 con el Teniente de Navío Fernando Zambrano y Avellaneda, oriundo de Constantina, Sevilla, Maestrante de Sevilla y después Contador de las Reales Cajas de Lima y Caballero de Alcántara. El matrimonio vivió en el Perú y luego en España, donde un hijo suyo, José Zambrano y Viana, natural de Lima, vistió en 1883 el hábito de Santiago.

María de la Natividad murió a los ochenta y dos años de edad en la ciudad de Buenos Aires, en 1871. Se había casado con el prócer de la Independencia Miguel Estanislao Soler y Otálora (1783-1849), Gobernador Intendente de la Banda Oriental en 1814 y Comandante de la Vanguardia del Ejército de los Andes, porteño, hijo del Teniente Coronel de los Reales Ejércitos Manuel Soler, y de Josefa Manuela Otálora, descendiente de la casa Ponce de León e Irala. Dejaron dos hijos: Micaela, señora de Bedriñana, y el Capitán de Navío Miguel Soler y Viana casado en Buenos Aires en 1859 con Genoveva Díaz. Cabe resaltar que Miguel Estanislao Soler y Otálora fue hermano de Irene, nacida en Bs.As en 1785, casada con Francisco Ramón Martínez de Haedo y Bayo -(Padres de la generación Martínez Haedo Soler, de quienes descendieron entre otros: el político nacionalista, legislador, ministro y consejero nacional de gobierno, Eduardo Víctor Haedo, Ester Haedo Young, mujer del famoso escritor salteño Enrique Amorim Areta-(1900-1960); y del escritor argentino Jorge Luis Borges).

María Francisca, casó el 29 de marzo de 1783 con el artillero real Francisco Antonio de Oribe y de las Casas, bautizado en Laredo el 20 de octubre de 1753, militar de escuela, Teniente Coronel del Real Cuerpo de Artillería. Francisco muere en Lima cuando ocupaba el cargo de Comandante de ese Real Cuerpo.

De este matrimonio nace la generación Oribe y Viana a la que pertenecieron:

Manuel Ceferino Oribe y Viana, nacido en Montevideo el 26 de agosto de 1792. Se había casado el 18 de febrero de 1829 con su sobrina carnal, Agustina Contucci Oribe, hija del comerciante naviero portugués Felipe Contucci, quien fue una importante figura en la lucha contra las invasiones inglesas de 1806/7. Producida la revolución oriental en 1811, Contucci proseguirá fiel a la casa de Borbón (España y Portugal), oponiéndose a la causa artiguista. Consumó su matrimonio en 1805 con la hermana mayor de Manuel Ceferino, su nombre era María Josefa Oribe y Viana, más conocida como "Pepita", nacida el 13 de septiembre de 1789. Al contrario que su marido, Josefa colaboró con la causa americana junto a sus hermanos menores, Manuel e Ignacio. En sus primeras hazañas figuran posibilitar en 1812 la fuga de las mazmorras españolas de Manuel Blanco Encalada, quien se convertiría en uno de los héroes de Chile. Para la Cruzada Libertadora trabajó afrontando costo y riesgos, y consiguió que los sargentos del regimiento Pernambucos se comprometieran con la causa oriental. Producido el desembarco de la Agraciada, encara una acción para curar los heridos orientales. Pepita Oribe, para los orientales, murió el 15 de enero de 1835. La línea varonil de su apellido se radicó en Argentina y España.

Su sangre en Uruguay se perpetuó en una de las ramas de su hija Dolores Oribe Contucci, casada con el Coronel Mariano Maza, de esta unión nace Elena Maza Oribe, casada con Alberto Marques y de estos Elvira, María Elena, Josefina, Angélica y Mercedes Marques Maza -esta última luego señora de Lessa, con abundante sucesión-, al igual que la mencionada Elvira Marques Maza, mujer Adolfo Ruete Legrand, padres de Fernando Ruete Marques, casado con Cristina Sanguinetti Piñeyro del Campo -, desciende de éste matrimonio entre otros el Dr. Santiago Ruete Sanguinetti, casado con Madelón Oddo Marquisá.

Igual de distinguida fue la sucesión que dejó en la vecina orilla, Agustina Maza y Oribe, casada con Carlos Agustín Rodríguez Larreta -, padres del escritor Enrique "Rodríguez" Larreta Maza, embajador argentino en Francia, durante la primera guerra mundial, quien visitó varias veces el frente de batalla. Recibió condecoraciones varias, entre ellas la "Legión de honor". A su muerte la academia de letras le hizo un importante homenaje en Ávila, España, ciudad en que imagino su obra cumbre "La Gloria de Don Ramiro". Sobre el zaguán del caserón patricio de los Larreta Anchorena, en Belgrano -hoy Museo de Arte Español Enrique Larreta-, se puede admirar una reproducciòn del águila arrogante e indoblegable de los Viana-(cabe resaltar que la imagen de fondo de este texto corresponde al mencionado museo). Fue marido de Josefína de Anchorena Castellanos -(hna. del mítico Aarón de Anchorena)-. Su estirpe se perpetuó en las familias Larreta-Anchorena, Zuberbühler Larreta, Zuberbühler De Corral, Santamarina Zuberbühler, Santamarina González-Álzaga, Zuberbühler Méndez-Duhau, Zuberbühler-Llambí. Así como también en las de Larreta Anchorena-Sánchez Álzaga, Sánchez Castellanos-Bengolea Gowland, Larreta Sánchez-Álzaga, Larreta Mitre, Larreta Green y Larreta Campos Alvear entre otras.

Carlos Rodríguez-Larreta Maza, casado con Carmen Marcó del Pont Pinedo -, padres de Agustina Rodríguez-Larreta Marcó del Pont, mujer de Rodolfo de Álzaga Unzué -, hijos de éste matrimonio fueron: Agustina María Isabel de Álzaga Unzué Rodríguez-Larreta, casada con Marcos González-Balcarce Bengolea -padres de Cecilia González Balcarce Álzaga, mujer de Carlos Eduardo Grondona Pereyra-Iraola -(descendiente de los Grondona Gowland) y estos padres de Cecilia Grondona Balcarce, mujer de Marcial Mariano Pereyra Iraola Anchorena; y Ángela Álzaga Unzué Rodríguez-Larreta, casada con Raúl Peralta-Ramos Bilbao -Ascendentes de las familias Peralta-Ramos Álzaga y Peralta-Ramos Blaquier.

Carmen Rodríguez Larreta Marcó del Pont, señora de Jorge Gándara Santamarina-(padres de Carmen Gándara Rodríguez-Larreta, mujer de Fernando Demaría Madero).

Augusto Rodríguez-Larreta Marcó del Pont, quien casó con Adela Leloir Unzué -sus hijos fueron, Augusto Rodríguez-Larreta Leloir, marido de Jacqueline de Elizalde Bruel. (padres de Sebastián Rodríguez-Larreta Elizalde, marido de Mercedes Ulloa Perkins y Adela Rodríguez-Larreta Elizalde, señora de Pablo Videla Uriburu); Horacio Rodríguez-Larreta Leloir, quien casó con Cristina Díaz Alberdi.

Otra hija del General Oribe llamada María Josefa Oribe Contucci, contrajo matrimonio con Félix Buxareo Rebollo, cuyo hijo Félix Buxareo Oribe, casado con Maruja Ayerza Zabala, se radicaron y murieron en Argentina no dejando descendencia.

Hermano de don Manuel Ceferino, fue Ignacio Abdon del Corazón de Jesús Oribe y Viana, nacido en Montevideo el 30 de julio de 1795, iniciado muy joven en la carrera militar, llegó a Brigadier General, fue el artífice de la derrota de Rivera en Carpintería. Muere el 26 de diciembre de 1866, esta enterrado en el primer cuerpo del Cementerio Central.

Había contraído matrimonio en la ciudad de Melo, el 18 de abril de 1826 con María Josefa Ramírez Carrasco -(hija del poderoso latifundista y comerciante José Ramírez Pérez y de María Carrasco -Fundador del linaje Ramírez en el Uruguay, estanciero, saladerista, abastecedor de carne de la guarnición y de la Marina Real. Su fortuna alcanzaba un volumen muy considerable. En 1841 tenía 48 negros esclavos trabajando en un saladero ubicado donde hoy está la Playa Ramírez, por quien lleva su nombre. Tenía una estancia que comprendía la friolera de 270.000 cuadras ubicada en el hoy llamado Rincón de Ramírez. Además campos en el Tala, en el Verdun,el arroyo de la Virgen y en las puntas del Canelón.

Ocho hijos tuvo Ignacio Abdon Oribe, seis nacidos fruto de su casamiento con María Josefa Ramírez y dos habidos con Dionisia Montiel. Los Oribe Ramírez fueron:

Juan Pedro Oribe Ramírez, Jefe Político del departamento de Colonia, bajo la administración de Atanasio Aguirre, se había casado con Francisca Fernández Fisterra, con sucesión, entre ellos Aquiles B. Oribe, escritor. Premiado con la medalla de oro y diploma de honor en el Congreso Americano de Bibliografía e Historia, celebrado en Buenos Aires en julio de 1916. Se había casado en 1910 con Elvira Buxareo, sin sucesión.

Ignacio María Oribe Ramírez, casado en Durazno con Jacinta López con sucesión que no conocemos.

Francisco Oribe Ramírez, unido en matrimonio a Juana Zuloaga Miller sucesión desconocida.

Francisca Oribe Ramírez, mujer del agrimensor alemán, Julio Gasser de Bauwart- sin sucesión.

Margarita Oribe Ramírez, casada en 1851 con Cesar Augusto Reyes del Villar, hijo del General de la Independencia y Cartógrafo José María Reyes, una calle del Prado donde tenía su quinta lleva su nombre. Con sucesión en las familias Reyes Oribe, Artagaveytia Reyes, Lerena Reyes, Cash Lerena, Campos Reyes, Nicola Reyes, Nicola Horta y Lacroze Reyes -(por el casamiento de Amalia Reyes Oribe Reyes con Alberto Daniel Lacroze Gowland, (fruto de éste matrimonio nacen Alberto Juan Lacroze Reyes, marido de Lelia López Fonseca Fernández; Sara Josefina Lacroze Reyes, mujer de Eugenio César Alemán -padres entre otros de la exitosa ambientadora Gloria César; y Amalia Lacroze Reyes Oribe, multimillonaria argentina, dueña de la cementera Loma Negra, casada en primeras nupcias con Hernán de Lafuente Sáenz-Valiente y en segundas con el empresario Alfredo Fortabat Pourtalé, con descendencia del primer matrimonio en Inés de Lafuente Lacroze, quien contrajo matrimonio en primeras nupcias con Julio Bengolea Madero- dejando sucesión en las familias Bengolea de Lafuente, Bengolea Peralta-Ramos y Ferrari Bengolea y en segundas con Julio Aurelio Amoedo, padres de Amalia Amoedo de Lafuente).

María Oribe Ramírez, nacida el 12 de octubre de 1838. Sobre ella hay una interesante anécdota que se refiere a la época en que el General Venancio Flores, ya arrasada Paysandú después de la capitulación de Villalba, entra en Montevideo acompañado por las fuerzas auxiliares del Imperio, todos los que habían acompañado los gobiernos de Pereira, de Berro y de Atanasio Cruz Aguirre se replegaron en sus casa a llorar la derrota y su infortunio. En María, sin embargo culminó la indignación y en actitud digna de admiración, sin miedo a la fuerza y sin preocupación por su destino, salió la calle, y allí ante la mirada atónita de Flores y de los oficiales del Emperador Don Pedro II quemó una bandera brasilera. Gesto este que fue respetado noblemente por el general victorioso.

Casada el 22 de diciembre de 1874 con Manuel Muñoz y Maines, hijo de Manuel Ventura Muñoz Marcó del Pont y Díaz de Vivar, porteño, y de Emira Maines y Rondeau -ésta hija a su vez del gibraltarino Fabio José Maines de Molina y de Josefina Rondeau, una de las hijas del Brigadier General José Casimiro Rondeau). Prócer de la Independencia americana, Director Supremo de las Provincias Unidas del Río de la Plata en 1815 y 1818 al 1820. Gobernador y Capitán General Provisorio del Estado Oriental del Uruguay 1828-1830.

Manuel Muñoz y Maines fue Diputado por Tacuarembó en el gobierno de Herrera y Obes de quien era intimo amigo (1894-1897).

De este matrimonio nacieron seis hijos: Rodolfo Muñoz Oribe, ingeniero agrimensor, casado en 1930 con Esther Baños, con sucesión en las familias: Muñoz Baños, Legrand Castellanos Muñoz, Sbarbaro Muñoz, Otero Muñoz, Ham Muñoz; Alcira Muñoz Oribe, nacida en 1884 y casada en 1908 con Julian Álvarez Susviela (del Clan Susviela- sobrino nieto de Ana Susviela Llano, madre entre otros de Juan Gualberto García Susviela, marido de Juana María Arrúe López de Castilla)-Del matrimonio de Alcira y Julián nacieron 4 hijos, de entre ellos Julián Álvarez Muñoz casado en 1941 con Luisa Montero Zorrilla-(hija de Raúl Montero Bustamante y de María Luisa Zorrilla de San Martín), padres de: Miguel Álvarez Montero, casado con Magdalena Arrarte Pons, con sucesión en la generación Álvarez Arrarte e Inés Álavarez Montero de quien proviene la generación, Escardó Álvarez, Escardó Carvalho; Schupp Escardó, Pena Escardó. Rodolfo Álvarez Muñoz, casado en 1942 con Juana Barañano Da Costa, de quienes provienen los Álvarez Barañano y Llambías Álvarez entre otros.

Elmira Muñoz Oribe, nacida en 1880, casada en 1912 con su primo hermano Alberto Biraben Muñoz, hijo de Alberto Biraben Gauvry, industrial francés, natural de Nay, Bajos Pirineos, actual Provincia de Pirineos Atlánticos. Fundador de la Compagnie Francaise de Mines d'Or d' le Uruguay, primera compañía francesa de oro del Uruguay, formada para la explotación de terrenos auríferos en Cuñapirú, departamento de Rivera. La compañía adquirió la mina San Pablo a la que le pusieron el nombre de Santa Ernestina, por Ernestina Muñoz y Maines, mujer de Biraben. Situada donde actualmente se encentra el Pueblo Minas de Corrales, fundado al iniciarse la explotación de las minas.
Su unigénito se llamó Alberto Manuel Biraben Muñoz, nacido en 1913 y casado en 1946 con Florencia Álzaga Pérez Roubin -hija de Juan Manuel de Álzaga Álzaga y de Florencia Pérez Roubin.
Padres de la actual generación:

Florencia Biraben Álzaga, nacida en 1948, soltera.

Alberto Ignacio Biraben Álzaga, nacido en el 1950 y casado en 1978 con María Emilia Jaume Martínez Seré -padres de María Emilia Biraben Jaume, casada con Juan Vega Beltrame, padres de Agustín Vega Biraben; María José Biraben Jaume; María Valentina Biraben Jaume, mujer de Gabriel Bove Itzaina, ; María Inés Biraben Jaume e Ignacio Biraben Jaume.

María Elmira Biraben Álzaga, nacida en el 1952, casada con el Doctor en Diplomacia Salvador Ric Riera, natural de Santa Cruz de las Sierra, Bolivia. Diplomático, ex Ministro de Obras Públicas de su país, ex Embajador de Bolivia en el nuestro. Padres de tres hijos: María Victoria, Nicolás y María Florencia Ric Biraben, todos viviendo en Santa Cruz de la Sierra; Pedro Biraben Álzaga, nacido en el 1953 y casado con Matilde Mainero Berro de Arechavaleta, también radicados en Santa Cruz de la Sierra, padres de Matías, Soledad y Federico Biraben Mainero.

Cora Muñoz Oribe; María Ventura "Maruja" Muñoz Oribe y Ernestina Muñoz Oribe, sin descendencia.

Las dos hijas que Ignacio Oribe tuvo con Dionisia Montiel, llamaron Nicolasa Oribe Montiel, casada en 1872 con Fernando Zuloaga Miller, hermano de Juana Zuloaga Miller la mujer de Francisco Oribe Ramírez, su medio hermano, la otra María Luisa Oribe Montiel quien se casó con el conde italiano natural de Pavía, de nombre Roberto Sabbia. Este matrimonio tuvo tres hijas que no tuvieron descendencia: Ida Sabbia y Oribe, María Herminia Sabbia y Oribe poetisa y gran militante del sector femenino del Partido Nacional y Estela Sabbia y Oribe casada con Eduardo Lasserre Legrand, sin sucesión.

El vencedor de Arroyo Grande y Presidente Legal, también fue hermano de Margarita Oribe y Viana, su marido, descendiente del Gral. Antonio de Larrazábal Basualdo y Agustina de Avellaneda Labayen, ambos de la más rancia aristocracia criolla, se llamó Martín Lasala y Fernández Larrazábal y fueron padres del Coronel Francisco Lasala y Oribe, Jefe del Estado Mayor del Gral. Oribe. Francisco, formó su hogar en unión de María Inés Furriol González Luna -hna.de: María de los Ángeles Furriol González Luna, casada con el Brigadier Eugenio Garzón Avellaneda -.

Los Lasala Furriol fueron:

Ángela Lasala Furriol, casada con Adolfo Areta Arrúe, quien fuera el séptimo hijo del matrimonio compuesto por don Juan Manuel Areta Landuaceres –Capitán de las Guardias Nacionales, Juan Manuel Areta Landuaceres, luego coronel de la independencia, descendiente de una de las familias más antiguas del país, enraizada a los Carrasco Melo-Coutinho, de vieja prosapia hispano-colonial, descendientes de los Incas del Perú y de una interminable nómina de monarcas europeos del medioevo, y de doña María Celestina Arrué y López de Castilla, casados el 25 de julio de 1828 en la Iglesia Matriz de Montvideo, hija de José Antonio Arrúe de Ipenza y de la matriarca patricia doña María Bernarda López de Castilla y Cáceres.

El futuro defensor de la heroica Paysandú nació en Montevideo el 11 de mayo de 1834, transcurriendo su infancia y parte de su juventud en el campo sitiador del cerrito. Atraído por la carrera de las armas, Adolfo Areta, sentó plaza en las filas oribistas, siendo apenas un adolescente, ejercicio que habría de por seguir aun después de firmarse la Paz del 8 de octubre de 1851, no obstante los altibajos del régimen político nacional. En el año 1852 figura como Capitán y Ayudante del Batallón 1º de Cazadores de Montevideo

En ocasión de la revolución de 1863, es destacado a la guarnición de Salto bajo las órdenes del Comandante Juan G. Lenguas. En los comienzos del segundo cerco sobre Paysandú, Areta pasó a integrar los cuadros locales y sus fuerzas a la par del indómito valor que desplegaron llenan uno de los capítulos más hermosos de la epopeya sanducera. Firme en el puesto de honor, que le había confiado el gobierno nacional, durante los días del sitio. Llegado a Montevideo, tócale redactar el 8 de enero de 1865, por pedido del Ministro de Guerra y Marina don Jacinto Susviela, el parte circunstanciado del sitio, informe que junto al de Aberasturi constituyen las únicas versiones oficiales sobre la defensa de Paysandú.

Adolfo fue hermano entre otros de  Laura Areta Arrúe, mujer de su primo hermano Juan Bernardino Arrúe Laguna -(Padres de Alberto Arrúe Areta, quien contrajo matrimonio con Hortensia Virginia Gowland Lasala, distinguida dama, nieta del mencionado Coronel Blanco, Francisco Lasala y Oribe).

Rafael Lasala Furriol, casado con su prima 2da. Josefa Oribe "Maturana"-, hija de Francisco Oribe y Viana y Dolores Maturana. Al morir Rafael, Josefa contrae segundas nupcias con Agustín de Urtubey y Estrada -, hno. de Ignacio de Urtubey y Estrada, marido de María Ignacia Elena Magdalena Gowland de Acevedo y Justiniano de Urtubey y Estrada, marido de Clara Villegas García de Zúñiga.

Una de las hijas del segundo matrimonio de Josefa Oribe con Agustín de Urtubey, fue María de Urtubey Oribe, unida en matrimonio a su primo Francisco de Viana y Oribe- hijo de Javier de Viana Ximénez y Dolores Oribe "Maturana" -, quienes fueron padres de Olga de Viana Urtubey, señora de Guillermo García Gil . Y nuevamente entronca el Clan Arrúe y sus descendientes una y otra vez con las familias Oribe, Viana, Gowland, Lasala y Álzaga entre otras en una especie de capricho genealógico.

Guillermo, era hijo de Juan Guillermo García Sotelo y Carmen Gil Arnábal, nieto paterno del Gral. Guillermo Bernardo Justo García Arrúe, distinguido militar, General triunfador en Tupambaé y como una de las grandes figuras del ejército encabezado por Aparicio Saravia. Pro-hombre de su parcialidad política, siendo designado en 1906 por el Directorio del Partido Nacional, General y Primer Jefe Militar y el 26 de febrero del próximo año, el mismo Directorio presidido por el Dr. Martín Aguirre, lo proclamó como candidato a la Presidencia de la República para el período 1907-11, (elecciones ganadas por el Dr. Claudio Williman). Guillermo García Gil, era sobrino paterno de Manuel García Arrúe Sotelo, marido de Hortensia Stirling, Celina García Arrúe Sotelo, casada con Enrique Quincke, Margarita García Arrúe Sotelo, con N. Latorre y Blanca García Arrúe Sotelo, quien dio su mano a Arturo Heber Jackson -hijo de Carlos Gustavo Heber Wichelhausen y Clara Jackson Errázquin, hno. de Alberto Heber Jackson casado con Margarita Uriarte Olascoaga -(viuda de Alberto, contrae 2das nupcias con Luis Alberto de Herrera)-, y de Elena Heber Jackson, señora de Alejandro Gallinal Conlazo -estos padres entre otros de Juan Pedro Gallinal Heber, marido de María Elena Artagaveytia Piñeyro.

Olga de Viana Urtubey y Guillermo García Gil, fueron padres de Guillermo García Viana, casado con Elida Mangarelli Ares -padres de María Inés García Mangarelli y Rosario García Mangarelli.

Carolina Lasala Furriol, mujer de Ignacio de Soria y Viana - padres de Ignacio Soria Lasala, casado con su prima hermana María Luisa Gowland Lasala y de Joaquín Soria Lasala marido de su otra prima Josefína Gowland Lasala.

María Inés Lasala Furriol, quien se casó con Eduardo de Lavalle y Oyuela- hno. de Elena Laurentina de Lavalle y Oyuela, mujer de Manuel Sáenz de Zumarán y Heredia.

Martín Lasala Furriol, se unió en matrimonio a Consuelo Álvarez Susviela, del Clan Obes- (prima de Juan Gualberto García Susviela, casado con Juana María Arrúe López de Castilla).

El matrimonio Lasala-Álvarez, tuvo calificada descendencia en ambas orillas del Plata.

Del matrimonio de Carolina Lasala Álvarez con Alfredo Peixoto Abreu Lima, fue hija María Inés Peixoto Lasala, mujer de Emilio Lamaison -progenitores de la familia Lamaison -Urioste Braga, entre otras. De Francisco Lasala Álvarez, casado con Esther Bofill Pons, nació Francisco Lasala Bofill, quien casó con Delia Ortiz-Basualdo Castro-Quirno y Mercedes Lasala Bofill, mujer de Ricardo Braun Menéndez-Behety -(los retoños de hoy se llaman, Braun Blaquier -dos ramas, Braun Travers, Frers Braun y Campos Alvear Braun); Miguel Lasala Álvarez, casó con Violeta Supervielle, de quién nació Odile Lasala Supervielle, mujer de Carlos García Arocena -padres de Mónica García-Arocena Lasala, casada con Armando Braun Estrugamou- su hijo se llamó, Agustín Braun García-Arocena, marido de Elvira Martínez de Hoz Bullrich-; y Carlos García-Arocena Lasala, unido en matrimonio a Rita Strauch Bofill.

Y por último, María Eusebia Lasala Furriol, quien se unió en matrimonio con Juan Francisco Gowland de Acevedo - hijo de Juan Francisco Gowland Philips Mallet y Fortunata de Acevedo Pérez de Arana - (hna. de Mariano Calixto de Acevedo Pérez de Arana, marido de Felicia Quincoces Aldecoa-).

Juan Francisco y María Eusebia fueron padres entre otros de Francisco Gowland Lasala; Clara Gowland Lasala, mujer de Luis Cardoso, ascendentes de la familia Cardoso en Montevideo; Carlos Gowland Lasala; María Luisa Gowland Lasala, casada con su primo hermano, Ignacio Soria Lasala y Josefina Gowland Lasala, con Joaquín Soria Lasala,- hermano del anterior hijos de los arriba mencionados Carolina Lasala Furriol e Ignacio de Soria y Viana ,- nietos del distinguido Brigadier General Joaquín de Soria y Margarita de Viana y Achucarro); y Hortensia Virginia Gowland Lasala, casada con Alberto Arrúe Areta.-(nieto de Juan Bernardino Arrúe López de Castilla-, Coronel y Jefe político en Durazno y bisnieto del Prócer de la Independencia y Ministro de Guerra y Marina, Julián Laguna Delgado-Melilla).

De la unión de Alberto y Hortensia, nace en ambas márgenes del Río de la Plata el linaje de los Arrúe Gowland, al que pertenecen entre otros Alberto, Juan Francisco y Clarita Arrúe Gowland. La unión de ambos apellidos sus descendientes la han perpetuado hasta el día de hoy.

Teresa Viana y Alzáybar se une en matrimonio a Tomás de Estrada de Monclá, porteño, muerto con el grado de Teniente Coronel de los Reales Ejércitos peleando contra los ingleses en el combate del Cardal, el 20 de enero de 1807, Teresa muere en 1836, dejando una sola hija: María de la Concepción de Estrada y Viana, bautizada el 9 de junio de 1785, casada en primeras nupcias con su tío, el Teniente de Navío Francisco Xavier de Viana y Alzáybar.

Cuatro hijos sobreviven del matrimonio de Viana-Estrada:

Francisco Javier (hijo) de Viana Estrada, es el progenitor de la línea mayor de su estirpe, desempeñó funciones de Oficial primero de la Jefatura Política del gobierno del Cerrito como corredor de comercio. Formó su hogar en Montevideo, muy joven con una dama perteneciente a un prestigioso hogar colonial, Mercedes Ximénez y Rodríguez, a la que desposó el 7 diciembre de 1823- hija del andaluz Manuel Ximénez, rico propietario, abastecedor de la Marina Real, Comisario de Guerra durante la dominación portuguesa. La casa de los Ximénez – hoy restaurada y sede de un museo- es una de las joyas más importantes que conserva Montevideo de la arquitectura del siglo XIX. En agosto de 1883 moría Mercedes Ximénez de Viana en su domicilio de la calle Convención, en la ciudad nueva. Dejaba cuatro hijos: Javier, casado; Mercedes, Margarita y Concepción, solteras. Dos años atrás había muerto soltera su hija Etelvina y antes aún, en 1879, su hijo José Joaquín. La descendencia de esta estirpe se continúa en las líneas de José Joaquín y Javier de Viana Ximénez.

Consta en Canelones, con fecha de agosto de 1867, el casamiento de José Joaquín de Viana Ximénez con Desideria Pérez, y en la misma ciudad, el 5 de agosto del año siguiente, el nacimiento de su hijo primogénito Javier de Viana y Pérez (1868-1926), uno de los más talentosos narradores uruguayos de su generación, casado en Montevideo en 1894 con María Eulalia Darribas, viuda de Pablo Libert.  El matrimonio Viana Darribas  tuvo por hijo a Gastón Viana Darribas.

De Javier de Viana Ximénez, casado con su prima segunda Dolores Oribe, hija de Francisco Oribe y Viana. De este último tálamo nacieron, entre otros; Ezequiel de Viana Oribe, que para disgusto de su familia se casa en Buenos Aires en 1881 con Carlota Ferreira, viuda de Regunaga- quien años después sería inmortalizada por Juan Manuel Blanes en 1883, su retrato es un ícono del arte uruguayo, siendo inspirador de numerosas leyendas); y Francisco de Viana Oribe, casado en 1882 con su prima hermana María de Urtubey- hija de Agustín de Urtubey Estrada y Josefa Oribe. Hija de esta unión fue Olga de Viana Urtubey, señora de Guillermo García Gil, descendiente de Juanita María Arrúe Castilla de García Susviela. Padres de: Guillermo García Viana, marido de Elida Mangarelli Ares -Padres de María Inés y Rosario García Mangarelli.

Tomás de Viana Estrada, es legislador en las cámaras del Cerrito, durante el asedio de Montevideo por su pariente Oribe.

Consolación de Viana Estrada, se casa el 22 de noviembre de 1834 con el acaudalado hombre de negocios Ramón de las Carreras Chopitea, uno de los hijos del antiguo cabildante Francisco de las Carreras de quien queda descendencia perpetuada hasta hoy en Montevideo y Buenos Aires, uno de los trece hijos que le da Consolación a Ramón, llamó Ernesto de las Carreras Viana, padre del exquisito Roberto de las Carreras, habido en Clarita García de Zúñiga.

Fernando Agustín de Viana Estrada, comisario durante la guerra en el campo sitiador de Montevideo y además saladerista, contrae matrimonio el 2 de agosto de 1835 con Juana Díaz, hija del rico comerciante andaluz José Díaz Cancino y de Francisca Romero Carmona y hermana de Carmen Díaz, casada con Javier Álvarez Susviela –medio hermano de Juan Gualberto García Susviela, marido de Juanita María Arrúe Castilla. (Abuelos entre otros de los Victorica Álvarez, de Javier Previtali Álvarez, casado con Enriqueta Donnelly; de Elena Calamet Álvarez casada con Adolfo Pareja Areta -descendiente del Clan Areta Arrúe, de María del Carmen Perey Álvarez, con Manuel Federico Arturo Soneira, y de las primeras damas Josefina Perey Álvarez de Serrato y Celia Álvarez Mouliá de Amézaga, entre otros. Dejó sucesión este matrimonio en la generación Viana Díaz: Carlota que dio su mano en 1867 al porteño Eugenio Arana Demaría, Dolores, casada en 1873 con Bernabé Arana, hermano del anterior; Fernando, que formó su hogar con Casiana Sierra, hija de Juan José de la Sierra Belegián y Manuela Tajes; y Francisca, casada en 1877 con su pariente Mariano Maza, hijo del Coronel Mariano Maza y de Dolores Oribe Contucci.

El 14 de octubre de 1821, María de la Concepción Estrada y Viana, viuda de su tío, el Brigadier General Francisco Xavier Viana y Alzáybar, contrae segundas nupcias con el Doctor y Constituyente Agustín de Urtubey, fundando la línea uruguaya de la familia, siendo padres de Concepción, mujer de Diego Langdon, Agustín, marido de su prima Josefa Oribe luego de ésta enviudar de su pariente Rafael Lasala Furriol-(hno.de la mencionada Ángela Lasala Furriol, casada con Adolfo Areta Arrúe), y de Justiniano de Urtubey y Estrada quien se unió en matrimonio el 5 de marzo de 1869 con Clara Villegas García de Zúñiga); e Ignacio de Urtubey Estrada, quien casó con María Ignacia Elena Magdalena Gowland de Acevedo –(Tía entre otros de Hortensia Virginia Gowland Lasala de Arrúe Areta)

Los hijos de Ignacio de Urtubey y María Ignacia Elena Gowland de Acevedo se llamaron Mariana, Elena, Malvina, Sara y Alberto.

Mariana Urtubey Gowland se casó en 1884 con Pedro Portillo y fueron padres de Elena Portillo Urtubey, mujer de Gilberto Montero Bustamante - hno. de Valentina Montero Bustamante, señora de Amadeo Félix Geille Castro-.

Elena Urtubey Gowland, mujer de Agustín Latham- padres de Agustín Latham Urtubey y Gowland, casado con Teófila Magrassi, unión de la que nace en 1943 Agustín Oscar Latham Urtubey Magrassi, quien contrae matrimonio en 1991 con Mercedes Kaulinis -padres de 4 hijas, Rosario, Milagros, Marina y Mercedes Latham- Urtubey Kaulinis.

Malvina Urtubey Gowland, dio su mano en matrimonio a Eduardo M. Sáez - (hno. del pintor Carlos F. Sáez). Sara, casó con Alberto Cuestas -hijo del Presidente Leopoldo Cuestas-. Sara y Alberto fueron padres de Sara Cuestas de Urtubey quien contrajo matrimonio con Luis Adolfo Carve y por último Alberto de Urtubey Gowland, casado en 1eras nupcias con Elena Dunne y en segundas con María Amalia Behrens.

Margarita de Viana y Alzáybar se casa tres veces: primero con Juan Pedro de Aguirre, luego con Agustín Abreu, muerto en noviembre de 1806 en las hostilidades contra los ingleses, y finalmente con Agustín de Estrada.

Por último Josefa de Viana y Alzáybar se casa con Joaquín Salgado, un caballero español.




Son todos ellos los últimos herederos del águila de Viana, el águila que se lanzó al vuelo desde el balconaje del viejo solar armero alavés, para formar nuevo nido en las tierras del Plata.

Mas de doscientos cincuenta años han pasado desde el afincamiento de los Viana en Montevideo. Mientras la ciudad de San Felipe y Santiago ve perecer el coloniaje hispano y nacer, crecer y desarrollarse una pujante república democrática. Los retoños de hoy se llaman Viana, Oribe, Maza, Larreta, Lasala, Gowland, Urtubey, Areta, Arrúe, Arrúe-Gowland, de las Carreras, de la Sierra, Vargas, Muñoz, García Wich, Ruete, Stewart, Berro, Biraben Álzaga, entre otras, reproduciendo en la sociedad democratizada del siglo XX, los rasgos, las cualidades, el estilo, las virtudes, las ceremonias de la sociabilidad que sus antepasados dieciochescos habían lucido en el salón del Mariscal.


Especial agradecimiento al Sr. Alberto Ignacio Biraben Álzaga-, -doblemente descendiente del linaje Oribe y Viana-, por compartir sus notas familiares, pieza fundamental para la elaboración de este post. Al igual que al Sr. Santiago Ruete Sanguinetti por su valioso aporte.




Bibliografía:

“El Libro de los Linajes” tomo I, II, III, IV, V, VI, Ricardo Goldaracena.
“El Patrciado Uruguayo”, Carlos Real de Azúa.
“Nobiliario del Antiguo Virreinato del Río de la Plata”, Carlos Calvo
“Génesis de la Familia Uruguaya” -Los habitantes de Montevideo en sus primeros 40 años.- Juan Alejandro Apolant.



Recopilación: Martín Arrúe Regules / Diego Castro Arrúe